Premonitorias

Soñé con dos Facundos idénticos,
también con dos Olivias.
Y ahí andan los cuatro,
crecidos, creciendo.

Vi a Nando que lloraba, tirado en mi litera. Desolado, mugriento.
Lo vi  flaco, al gordo, y los dos conversamos, lloramos.
Y ahí andamos los tres, olvidados, llorando, dejados.
Nos soñé desamados, desamando.

Recurrencia de una sola noche,
miré a Sol y sus mil cuadros.
Escuché los aplausos. Galardones, premios, laureles.
No quise soñarme odiando.

Carmen me dio sus razones, lo amaba Qué tanto! 
Hoy duerme lleno de flores, cubierto de barro.