Conversación de pasillo.

En el pasillo de 6 metros de largo por 1 metro de ancho,  
sin ventanas, que hace las veces de sala de espera de la
Oficina de la Dirección de la Función Pública MGP,
trámites PRE-OCUPACIONALES para el ingreso a la 
docencia de nuestro partido de Gral Pueyrredón. 
Varias personas estamos en fila detrás de la ventanilla  
de vidrio translúcido y rugoso. En la misma cuelga un 
cartel donde se lee: HORARIO DE ATENCIÓN 
DE 9,30 A 13,15 HS. NO GOLPEE DESPUÉS  
DE ESE HORARIO. Son las 10,30 hs.

Señora 1- (Golpeando tímidamente la ventanilla.  
Nos habla en voz muy baja a todos los de la fila como 
para que no la escuchen las de adentro)  
Ya golpeé cinco veces. Están ahí... las veo. 
(Los que estamos detrás de ella esperamos hace buen rato) 
Pero no abren. (Entran al pasillo cinco personas más, 
que se dirigen a golpear nuevamente.) Yo ya golpeé. Cinco veces. 
Voy a golpear de nuevo. (Golpea) Pero no dan bolilla.  
(Golpea por séptima vez) Cuando venga Arroyo  
¡cómo van a marchar! Todos, uno atrás de otro  
¡como patitos van a marchar!

Señora 2- No tendría que ser así. (Golpea tímidamente la ventanilla)

Señora 1- (Golpeando con la misma suavidad) Y van... 
¿Diez veces golpeamos? Ésto no va a cambiar nunca.  
(Ambas señoras tienen miedo de golpear más fuerte  
de lo que la norma indica. Es obvio que las dos  
empleadas que conversan del otro lado de la  
ventanilla escuchan perfectamente los golpecitos,  
así como todos nosotros estamos escuchando  
cómo conversan ellas)

YO- (Me acerco a la ventanilla y golpeo muy fuertemente.  
Vuelvo a mi lugar en la fila). A lo mejor sólo se trata de  
golpear un poco más fuerte.

Empleada pública- (abriendo casi inmediatamente 
la ventanilla. Completamente enfurecida) ¿¡Quién golpeó así!?

YO- Estamos esperando que nos atiendan.

Empleada Pública- (mirándome con ira) ¿Quienes?

YO- Yo y todos los que estamos acá parados.

Empleada Pública- (a la Señora 1) ¡No sabe cómo estamos! 
Se cayó el sistema a las 9 de la mañana. 
(A mi) ¿Usted está primero?

YO- No. La señora que golpeaba.

Señora 1- (ruborizada) Yo goleé despacito... no quería molestar.

La empleada pública atiende rápidamente a las dos señoras que  
están delante mío. Cuando me toca a mi. 
Me pide la planilla en la que tiene que escribir la fecha 
del turno correspondiente para realizarme el Apto médico.

Empleada pública- (Reteniendo mi planilla) Lo tuyo va a tardar. 
(Se retira con mi planilla. Atiende a los restantes en cuestión de  
diez minutos. A nadie se le ocurre decirme ¨Gracias¨.
Todos se van retirando. Cuando quedo sola. Cierra la ventanilla.  
A los diez minutos sale con mis papeles en la mano)  
El único turno que queda es para el 24 de octubre. Dentro de un mes.

YO- Bueno, gracias.

La verdad es que respiré hondo y pensé en lo que me dijo mi psicóloga 
en la última sesión ¨Tenés que trabajar la paciencia¨  
Y hoy la trabajé como nunca.

Y si gana Arroyo las cosas van a ser exactamente igual porque  
¨los patitos¨ son todos los que estaban conmigo en la fila  
-no los empleados públicos- más que patitos: son ovejas,  
o cotorras que les gusta repetir boludeces en los pasillos 
y mirar a los que quieren cambiar algo como si estuvieran  
locos- esa sería yo. Creo que darme un turno para dentro de un mes fue una  
represalia de la Empleada pública. Flor de hija de puta.

¿Quieren a Arroyo? Se lo merecen.