domingo, 28 de abril de 2019

INSTRUCCIONES PARA PRACTICAR LA FELICIDAD.

A la felicidad
-para que te salga-
hay que practicarla.

Sí. Es como tocar en un instrumento una melodia nueva. Al instrumento ya lo conocés. Y tal vez, a la canción nueva también. Sólo falta unirte a vos con el instrumento y la melodía -"la tercera cosa", esa unión con lo nuevo, lo que te saca de la rutina y el aburrimiento. Lo que te desestabiliza, te moviliza y se vuelve gratificante -y mucho- cuando por fin lográs ponerlo en su lugar. Y lo lográs. Comienza un nuevo desafío. Y así interminablemente.

Entonces, te explico:
Primero: Te sentás, a las 10 de la mañana si es fin de semana o a las 18, si ese día trabajaste -supongamos- tranquilito junto al instrumento y empezás a sonar las primeras notas. Repetís muchas veces los errores de ese pequeño fragmento de ruido y con pequeñas variaciones hasta que, de repente, después de una pausa para estirar los dedos.... volvés  a tocar y te escuchás a vos y al instrumento haciendo un loop interminable que ahora te sale bien y suena parecido a la musiquita que está en tu cabeza. Entonces seguís con un fragmento nuevo y de nuevo y nuevamente repetís todas las acciones. Y así hasta que completás toda la melodía. La tocás varias veces. Te animás a tararearla y por fin a tocarla mientras cantás a viva voz y hacés movimientos rítmicos con todo el cuerpo.
Te estás riendo sola. Mirás la hora. Son las 15 de un domingo, o las 22 de un día laboral. Pasaron muchas horas. Estás hambrienta. Te volvés a reír. Vas a la cocina y te preparás una rica comidita.

Segundo: Pensás qué otra cosa querés hacer hoy, o mañana.

Tercero: La hacés siguiendo los mismos pasos que con la melodía: A tu ritmo.

Cuarto: Te volvéis a reír.

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